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Síndrome postvacacional: sus síntomas y cómo puedo ayudarte

El síndrome post-vacacional. Síntomas y ayuda psicológica

¿Qué el síndrome postvacacional?

El síndrome postvacacional es un conjunto de síntomas físicos y psicológicos que se producen al volver al trabajo después de un periodo de vacaciones y ocio. No se trata de una enfermedad mental, sino de una dificultad de adaptación que suele durar entre una semana y quince días. Sin embargo, si se prolonga más tiempo o se intensifica, puede derivar en un trastorno adaptativo o un trastorno afectivo estacional.

Soy Psicóloga especializada en el tratamiento de este tipo de síndromes

¿Has vuelto de las vacaciones y te sientes triste, ansioso, irritable o cansado? ¿Te cuesta adaptarte a la rutina laboral y a las obligaciones diarias? ¿Has perdido el interés o la motivación por lo que haces? Si has respondido afirmativamente a alguna de estas preguntas, es posible que estés sufriendo el síndrome postvacacional.

Si quieres saber más sobre mi método de terapia cognitivo conductual, Estaré encantada de atenderte y de ayudarte a superar el síndrome postvacacional.

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¿Qué factores influyen en el síndrome postvacacional?

El síndrome postvacacional puede afectar a cualquier persona que tenga que volver al trabajo después de unas vacaciones, pero hay algunos factores que pueden aumentar el riesgo o la intensidad de sufrirlo:

  • La duración y la calidad de las vacaciones. Cuanto más largas y satisfactorias hayan sido las vacaciones, mayor será el contraste con la vuelta al trabajo y más difícil será la adaptación.

  • La planificación y la organización del regreso. Es conveniente volver con unos días de antelación para ordenar la casa, hacer la compra, preparar el material de trabajo y ajustar los horarios de sueño y comida. Así se evita el estrés y el agobio del último momento.

  • La actitud y la motivación hacia el trabajo. Si se tiene una visión negativa del trabajo, si no se está satisfecho con lo que se hace o si se siente mucha presión o exigencia, es más probable que se experimente el síndrome postvacacional. Por el contrario, si se tiene una actitud positiva, si se disfruta con el trabajo o si se tienen expectativas e ilusiones por los nuevos proyectos, es más fácil afrontar la vuelta con optimismo.

  • El apoyo social y familiar. Contar con el respaldo y la comprensión de los seres queridos puede ayudar a superar el síndrome postvacacional. También es importante mantener el contacto con los amigos y las actividades de ocio que nos gustan durante el año.

Síntomas del síndrome postvacacional

Bajo estado de ánimo, tristeza, apatía o depresión

Este es uno de los síntomas más frecuentes del síndrome postvacacional. Se caracteriza por una sensación de vacío, melancolía, desánimo o infelicidad que se produce al dejar atrás las experiencias positivas vividas durante las vacaciones y enfrentarse a la realidad laboral. La persona puede sentir que su trabajo no tiene sentido, que no le aporta nada o que no le hace feliz.

Ansiedad, angustia, nerviosismo o estrés

Otro síntoma habitual del síndrome postvacacional es la ansiedad, que se manifiesta por una sensación de inquietud, preocupación, miedo o agobio ante la vuelta al trabajo. La persona puede temer no estar a la altura de las exigencias, no cumplir con los plazos, no llevarse bien con los compañeros o los jefes o no tener tiempo para todo. La ansiedad puede provocar también síntomas físicos como taquicardia, sudoración, temblores o dificultad para respirar.

Inseguridad, agresividad o inquietud

El síndrome postvacacional también puede causar cambios en el carácter y el comportamiento de la persona. Puede volverse más irritable, intolerante, impaciente o susceptible ante cualquier contratiempo o crítica. También puede sentirse más insegura, vulnerable o indecisa a la hora de tomar decisiones o resolver problemas. En algunos casos, puede mostrar una actitud más agresiva, rebelde o desafiante hacia la autoridad o las normas.

Dificultades para concentrarse, recordar o tomar decisiones

La falta de adaptación al ritmo y las demandas del trabajo puede afectar también a las capacidades cognitivas de la persona. Puede tener problemas para concentrarse en sus tareas, para recordar información relevante o para tomar decisiones acertadas. Esto puede generar un menor rendimiento laboral, errores frecuentes, olvidos o despistes.

Alteraciones del sueño, como insomnio o hipersomnia

El sueño es otro aspecto que se ve alterado por el síndrome postvacacional. La persona puede tener dificultades para conciliar el sueño por la noche, para mantenerlo durante toda la noche o para despertarse por la mañana. También puede sufrir somnolencia diurna, falta de energía o necesidad de dormir más horas de lo habitual. Estas alteraciones del sueño pueden deberse al cambio de horarios entre las vacaciones y el trabajo, al estrés o a la depresión.

Cambios en el apetito, como falta o exceso de hambre

El apetito es otro indicador del estado emocional de la persona. El síndrome postvacacional puede provocar una pérdida del apetito por la falta de interés o el desánimo. También puede provocar un aumento del apetito por la ansiedad o el aburrimiento. Estos cambios en el apetito pueden conllevar una pérdida o un aumento de peso no deseado.

Cansancio, fatiga, falta de energía o dolores musculares

El último síntoma del síndrome postvacacional es el cansancio físico. La persona puede sentirse agotada, débil, sin fuerzas o sin ganas de hacer nada. También puede experimentar dolores musculares, contracturas, tensión o rigidez en el cuerpo. Estos síntomas físicos pueden deberse al cambio de actividad entre las vacaciones y el trabajo, a la falta de sueño o a la somatización del malestar emocional.

¿Cómo puedo ayudarte con el síndrome postvacacional?

Si crees que estás sufriendo el síndrome postvacacional y no sabes cómo superarlo, puedo ayudarte con mi método de terapia cognitivo conductual. Se trata de un tipo de psicoterapia que te ayuda a identificar y modificar los pensamientos negativos e irracionales que te generan malestar emocional y a cambiar los comportamientos que te impiden adaptarte a tu situación actual.
En mi consulta de psicología presencial en Madrid o por videoconsulta de psicología, te ofreceré un espacio de confianza y respeto donde podrás expresar tus sentimientos, tus preocupaciones y tus objetivos. Juntos, elaboraremos un plan de acción personalizado y adaptado a tus necesidades, donde te enseñaré técnicas y estrategias para afrontar el síndrome postvacacional de forma eficaz y duradera.

Pilar Sánchez Psicóloga